En las viviendas de varias plantas uno de los elementos más importantes y que a menudo puede pasar desapercibido es la escalera en L. Además de ser un elemento clave en términos de funcionalidad, aporta mucho al diseño interior y al aprovechamiento del espacio. Si te estás planteando cómo hacer escaleras en L para tu hogar, o simplemente quieres conocer más sobre este tipo de escaleras, aquí te lo explicamos paso a paso.
¿Qué es una escalera en L?
Una escalera en L es un tipo de escalera que forma un ángulo de 90 grados en algún punto de su recorrido, creando una «L». Este giro puede ocurrir en la parte superior, en la parte inferior, o a mitad de la escalera, dependiendo del diseño y del espacio disponible en la casa. Es una opción excelente cuando no se tiene espacio para una escalera recta y se necesita aprovechar al máximo el área.
Ventajas de una escalera en L
La escalera tipo L tiene muchas ventajas sobre otros tipos de escaleras. A continuación te detallamos algunas de las más importantes:
- Ahorro de espacio. Este tipo de escalera es perfecta para casas donde el espacio es un bien preciado, ya que permite ajustar su diseño a los rincones más difíciles.
- Mayor seguridad. Al tener un ángulo de giro, esta escalera ofrece un punto de descanso, lo que reduce el riesgo de caídas desde alturas elevadas.
- Estética moderna. Las escaleras en forma de L aportan un toque contemporáneo que mejora el diseño interior de cualquier vivienda.
- Versatilidad en materiales. Se pueden construir con una amplia variedad de materiales como hormigón, madera o metal, lo que permite ajustarlas al estilo general de la casa.
¿Cómo diseñar una escalera en L?
El diseño de una escalera en L puede parecer complicado, pero si sigues algunos pasos básicos, podrás adaptarla a tus necesidades y al espacio disponible en tu hogar. Aquí te mostramos los pasos para diseñarla.
Evalúa el espacio disponible
Lo primero que debes hacer es medir cuidadosamente el espacio en el que piensas instalar la escalera. Es crucial que tengas claras tanto las dimensiones horizontales como verticales. La altura entre los pisos y el ancho del área que destinarás a la escalera son claves para que el diseño sea cómodo y seguro.
Define el punto de giro
En las escaleras en forma de L, el ángulo de 90 grados se puede situar en diferentes puntos. El más común es en la mitad del recorrido, pero también puede ser en la parte superior o en la inferior, dependiendo de la distribución de la casa.
Elige los materiales adecuados
En una casa prefabricada de hormigón, los materiales de la escalera deben estar en sintonía con el resto de la construcción. El hormigón es una excelente opción por su durabilidad y resistencia, pero también puedes combinarlo con otros materiales como la madera o el metal para darle un toque más cálido o moderno.
Considera el diseño de la barandilla
La barandilla no solo es un elemento de seguridad, sino que también influye en el estilo de la escalera. Si quieres un look minimalista y moderno, puedes optar por barandillas de metal o vidrio. Si prefieres algo más tradicional, la madera siempre es una buena opción.
¿Cómo calcular una escalera en L?
Uno de los aspectos más importantes al diseñar una escalera tipo L es el cálculo correcto de las proporciones. No querrás terminar con escalones demasiado altos o un ángulo incómodo que haga difícil o peligroso su uso.
Echemos un vistazo a los pasos principales para calcularla:
- Calcula la altura total. La altura total es la distancia entre el piso inferior y el piso superior. Una vez que tengas esta medida, puedes empezar a calcular el número de escalones y la inclinación de la escalera.
- Divide la altura por el número de escalones. El número de escalones se determina dividiendo la altura total por la altura ideal de cada peldaño, que suele rondar entre 17 y 19 cm. Asegúrate de que todos los escalones tengan la misma altura para evitar accidentes.
- Define el espacio para la meseta. El giro de 90 grados en las escaleras en L suele requerir una meseta o descanso. Esta debe ser lo suficientemente amplia para que una persona pueda detenerse cómodamente. Lo recomendable es que tenga al menos el mismo ancho que la escalera.
- Ajusta la inclinación. Una escalera muy empinada puede ser incómoda y peligrosa, mientras que una muy plana ocupará demasiado espacio. La inclinación ideal de una escalera en L suele estar entre los 30 y 35 grados.
Tipos de escaleras en L
Existen varios tipos de escaleras en L, y cada uno tiene sus particularidades en función del espacio y el diseño que busques. A continuación, te presentamos algunos de los más comunes.
Con meseta
Este es el tipo más habitual de escalera en L. La meseta, o descanso, se sitúa en el punto de giro, proporcionando un lugar para hacer una pausa durante la subida o bajada. Este diseño encaja muy bien para viviendas con niños o personas mayores, ya que reduce el riesgo de caídas.
Sin meseta
En lugar de una meseta, este tipo de escalera utiliza escalones triangulares para realizar el giro. Aunque ocupa menos espacio, puede ser menos cómoda o segura, especialmente si no se diseña con cuidado.
Con almacenamiento debajo
Si tu casa prefabricada tiene un diseño compacto, aprovechar el espacio debajo de la escalera para almacenamiento es una opción excelente. En este tipo de escalera en L, puedes instalar armarios, estanterías o incluso una pequeña despensa, optimizando el uso del espacio disponible.
En definitiva, la escalera en L es una solución inteligente, elegante y funcional para cualquier vivienda de más de una planta. Desde su diseño hasta su cálculo, cada detalle cuenta para asegurarte de que se adapte perfectamente a tu hogar. Además, puedes aprovechar el espacio que queda debajo de la escalera para almacenamiento, o incluso renovar tus puertas de madera barnizada para que el conjunto sea armónico.
En nuestra empresa de casas prefabricadas somos expertos en la construcción de viviendas de hormigón y te ayudamos a incorporar los mejores diseños, como las escaleras en L, en tu proyecto. Si estás pensando en construir o renovar tu casa, no dudes en contactarnos.
